Hugo Lloris: “Dibu tiene todo para ser el mejor arquero de la historia de Argentina”
La revelación la hizo un día cualquiera Licha López. “Venía siempre a mí habitación y terminó siendo matero. Como yo seguía los partidos de Racing por Internet, también se hizo hincha de...
La revelación la hizo un día cualquiera Licha López. “Venía siempre a mí habitación y terminó siendo matero. Como yo seguía los partidos de Racing por Internet, también se hizo hincha de la Academia. Hablamos con frecuencia y sigue nuestra actualidad. En él tenemos un hincha más”, contaba Lisandro con orgullo racinguista sobre su amigo, su compañero en Lyon durante tres temporadas. Ahora se ríe Hugo Lloris del otro lado del Zoom cuando escucha la anécdota… “Es verdad, todo es verdad…”, aprueba y vuelve a sonreír. Responde con sobriedad y simpatía. Está en Los Ángeles, se siente cómodo en Los Ángeles y juega en la MLS con Los Ángeles FC desde principios de 2024. “Estamos disfrutando de California. El clima es muy bueno después de tantos años en Londres, en Tottenham… El clima, las montañas… hay algunas similitudes con Niza, mi ciudad”, comparte. A los 38 años atraviesa otra etapa de su vida y las rigurosidades de la élite pertenecen a un pasado que ya observa con un ángulo diferente. La Argentina se entromete en sus emociones y se entrega a la charla con muchos giros en celeste y blanco.
Los Lloris se encuentran dónde necesitaban estar. “Los Ángeles es lo que estábamos buscando con mi familia. Queríamos una experiencia de vida diferente y estamos muy contentos de este estilo de vida, la libertad, muchas cosas por descubrir… Mi club está creciendo, tiene muchos fans y lo disfruto mucho. Es muy diferente a lo que estaba acostumbrado en Europa, pero en este momento de mi vida estoy muy feliz”, le cuenta a LA NACION. Hugo habla en plural, claro. Todos cruzaron el océano Atlántico, su esposa Marine y sus tres hijos, Anna Rose, de 14 años, Giuliana, de 10, y el pequeño Leandro, de 5. Eligió desconectarse del vértigo.
–¿Cómo ha sido tener de compañeros o entrenadores a argentinos, desde Lisandro en Lyon hasta Mauricio Pochettino en Tottenham? Y otros como Cuti Romero, Lo Celso, Lamela. ¿Hablas con ellos?
–Honestamente tengo muy buena conexión con mis compañeros argentinos. En Niza conocí a Franco Dolci , y luego en Lyon al ‘Chelito’ Delgado y a ‘Licha’ López. Bueno, con ‘Licha’ tuve, tenemos, una relación muy especial, es una persona increíble, pasamos mucho tiempo juntos… sí, sí, tomando mate y viendo a Racing… Yo soy hincha de Racing por él, jaja. Y cuando me mudé a Tottenham conocí a muchos argentinos. A Mauricio Pochettino, que es más que un entrenador. Con él estamos en contacto aún, somos amigos. Tenemos una muy linda relación. También con el arquero Paulo Gazzaniga . Juan Foyth… Con ‘Coco’ Lamela también, que es uno de mis mejores amigos en el fútbol… Y por supuesto con Gio Lo Celso y ‘Cuti’ Romero. Sólo puedo hablar bien de todos ellos. Son muy buenas personas, estoy muy agradecido de haberlos conocido. Todos tienen muy linda personalidad, respetan mucho su país, a la Argentina, y son grandes seres humanos. Tienen energía y espíritu positivo y son muy dedicados al fútbol.
–¿Qué te parece Pochettino como entrenador de la selección de los Estados Unidos?
–Es muy loco que ahora nos hayamos encontramos en América. Yo jugando para la MLS y él como manager de la selección nacional. Estoy muy contento de verlo en este desafío y estoy muy orgulloso de él… Es una gran responsabilidad ser el manager del equipo que será sede del próximo Mundial. Es una gran presión, pero lo conozco a Mauricio, a su staff, y no tengo dudas que estará listo para competir en el Mundial y logrará una buena competición, harán un buen papel. A pesar de la gran expectativa que genera, sé que Mauricio hará un gran trabajo.
–¿Qué análisis hacés del desarrollo de la MLS y el impacto de Messi y otras figuras?
–Creo que la MLS está evolucionando año tras año, está mejorando y fortaleciéndose. Obviamente, desde la llegada de Messi a Miami la liga empezó a tener mucha más exposición en todo el mundo, y eso es increíble para la imagen. Además, cada vez se hace más interesante competir en la MLS porque figuras muy importantes, como Suárez, Jordi Alba y tantos más traen su experiencia y calidad consigo. Es que… por otra parte quiero decir que estoy impresionado: hay muchos jugadores que, cuando llegué, yo no conocía, y realmente son muy buenos y talentosos. Seguramente en un tiempo podrán estar jugando en Europa. Hasta el momento, para mí es una muy buena experiencia.
–¿Cómo te imaginás el Mundial 2026, con más países y en los Estados Unidos?
–Estados Unidos representa mucho en el mundo y espero una gran competencia. Para mí es un poco loco, porque el primer Mundial que vi fue justamente el de Estados Unidos en 1994, yo tenía 7 años, y creo que fue un gran éxito. Creo que es muy bueno para el fútbol, y para que la MLS adquiera otra dimensión en los próximos años. Será muy bueno para que los Estados Unidos muestren a los fanáticos del mundo su gran infraestructura. Hay muchos estadios, y cada vez más fanáticos… Estarán listos para ser los anfitriones de este Mundial –también México y Canadá, por supuesto–. Durante casi dos meses todo el mundo estará enfocado en este Mundial. Creo que para Argentina será un gran desafío pelear por el status de campeones que tienen en este momento. Y Brasil, Francia, España también tienen un gran desafío por delante... Y también los Estados Unidos, que pueden sorprender. La Copa del Mundo es la mejor competencia en la que todo jugador quiere participar.
Y lo dice el hombre récord, en dos ocasiones nominado al Balón de Oro. Nadie jugó más partidos que él en la historia de la selección francesa (145). Nadie lució más veces el brazalete de capitán en Les Bleus… y vale recordar que lo llevaron Michel Platini, Didier Deschamps, Laurent Blanc, Marcel Desailly, Patrick Vieira, Zinedine Zidane… Ningún arquero del planeta atajó tantos encuentros en las Copas del Mundo, 20 –le quitó la marca al alemán Manuel Neuer en la final de Qatar contra la Argentina–, repartidos entre Sudáfrica, Brasil, Rusia y precisamente Qatar. Tres semanas después del duelo decisivo en Doha, anunció su despedida de la selección. Se podría haber marchado bicampeón… pero Lionel Saloni y sus lobos hambrientos habían diagramado otros planes.
Campeón del mundo en Rusia 2018, campeón de la Liga de las Naciones 20/21 y subcampeón de la Eurocopa 2016. Se despidió por la puerta de la discreción un futbolista que dejó una huella desde la constancia y la regularidad de los profesionales que se toman muy en serio su trabajo. Compañeros de distintas camadas coincidieron: siempre se hizo escuchar, y nadie le conoció sus gritos.
–¿Cómo ves a la selección de Francia, hoy?
–Generación tras generación, Francia siempre tuvo muy buenos equipos. Y ahora tiene un gran equipo. Es importante que haya una muy buena atmósfera y espíritu, y que el equipo nacional esté por sobre cualquier ego o personalidad. Habrá algo especial en el Mundial y es que será la última competición de Didier Deschamps, que ya anunció su despedida. Tenemos grandes jugadores, pero es la competencia más difícil, desafiante y la mejor, sin dudas.
Hugo Hadrien Dominique Lloris escucha con atención las preguntas formuladas lentamente y las comprende en español. Sus abuelos paternos, catalanes, huyeron a Francia durante la Guerra Civil española. Su historia no es la usual. De familia acomodada y buena posición social, hijo del banquero Luc Lloris y la abogada Marie, Hugo en la niñez cumplió con el colegio, estudiaba idiomas y… jugaba al tenis. Y cuentan que jugaba muy bien. Pero apareció el fútbol en su camino, y el arco en particular.
En la adolescencia tuvo que optar: el club de tenis Des Combes llegó a presentarle una oferta para iniciar una trayectoria profesional, y los ojeadores del Niza lo invitaron a sus inferiores. Está a la vista su decisión. Una elección que siguió su hermano Gautier, nueve años menor y también con aptitudes tenísticas, pero actualmente uno de los zagueros de Le Havre, en la Liga 1.
Caminos diferentes a los de Lionel Messi… pero siempre pueden aparecer puntos de coincidencia. Tienen casi la misma edad, Hugo es seis meses mayor. En julio de 2005, hace dos décadas, los dos se coronaban con sus selecciones: Leo era campeón del mundo Sub 20, en Ultrech, en los Países Bajos, y Hugo se coronaba en el Europeo Sub 19, en Belfast, Irlanda del Norte.
Las estadísticas arrojan que el rosarino le marcó tres goles cuando enfrentó a Lyon y a Tottenham, con Barcelona, y los dos de la final en Doha. Hay una genuina admiración del francés. Por ejemplo... esto ocurrió en la conferencia de prensa anterior al duelo por los octavos de final del Mundial de Rusia 2018. “¿Si Mbappé es parecido a Messi? No, Messi es único. Es absolutamente imposible compararlo con alguien”, aclaró. Ni titubeó.
–¿Creés que Messi jugará en 2026 el Mundial? ¿Te gustaría que lo juegue?
–No veo a la Argentina sin Messi en el próximo Mundial. Creo que será con Messi. Aún juega y disfruta del fútbol. Es su decisión, pero claro que queremos seguir viéndolo jugar.
–Lo volverás a enfrentar el próximo jueves en los cuartos de final de la Concachampions… ¿Qué pensás cuando estás mano a mano con él en una cancha? ¿Te preparás de manera especial?
–Sí, por supuesto que me preparo especialmente cuando juego contra Leo. Y siempre es una tarea muy complicada. Además, hay muy buenos jugadores en Inter Miami... también está Luis Suárez, Busquets, Jordi Alba, etc. Hay que prepararse, sin dudas.
–El año pasado, antes de un partido de Los Angeles FC contra Inter Miami anticipaste que le ibas a pedir la camiseta a Messi… “La necesito”, comentaste exactamente. ¿La tenés?
–No, no... no tuve chances, me pone un poco incómodo, jaja. Nunca pude quedarme con la camiseta de Messi… Tengo mucha admiración por Leo. Para mi está en el top de la lista de los mejores jugadores, sin dudas. Yo soy de la generación que pudo ver y jugar contra Leo.
–Alguna vez dijiste “esas imágenes me persiguieron durante varios meses”, refiriéndote a los penales de la final en Qatar. Incluso, tocaste el remate de Leandro Paredes. Hoy, que ha pasado el tiempo, ¿cuáles son los recuerdos?
–… Ya es parte de la historia, no se puede escribir nuevamente. Creo que fue una grandísima experiencia. Al final, todos queremos ganar el Mundial, pero sólo uno lo gana. El partido fue muy demandante para todos y el mejor equipo lo ganó. El mejor equipo gana el trofeo, no hay vueltas. Si ganó Argentina es porque se lo mereció, y lo hicieron todo. Insisto: uno siempre quiere ganar. Estuvimos cerca, pero perdimos jugadores muy importantes para nosotros en este momento, como Paul Pogba, Kante y Benzema. De todos modos, pudimos crear un grupo de jugadores que pudieron representar bien a nuestro país. Creemos que los franceses estuvieron contentos por nuestro esfuerzo, pero bien, un Mundial uno siempre quiere ganarlo. Lo ideal, para nosotros, hubiera sido que el Mundial se hubiese jugado un poco antes para no perder los jugadores que se lesionaron.
–¿Qué opinás del ‘Dibu’ Martínez? ¿Te gusta? “El argentino más odiado en Francia”, ha dicho la prensa francesa…
–Sí, sí, me gusta Dibu. Hay muchos cuestionamientos por su personalidad, pero yo sé que es alguien que le agrega mucho valor. Tiene una gran personalidad dentro y fuera de la cancha. Y si bien es criticado por cómo se comporta a veces en los penales, creo que él lo hace muy bien y está defendiendo su arco, su país, su club. En los penales es uno de los mejores, sino el mejor. Pero él no es sólo bueno en los penales, es un gran arquero y ha sido fantástico en la Premier League con Aston Villa y decisivo con Argentina para ganar trofeos. Para ganar trofeos tenés que ser un gran arquero. Tiene todo para ser uno de los mejores, o el mejor arquero de la historia de Argentina. Le tengo mucho respeto y estoy contento por su condición.