Miguel Borja cuesta la mitad de dinero que en 2024, pero quiere valer el doble: cómo convencer a Gallardo y enamorar a los hinchas de River
“Me gusta la exigencia de River. La idea es seguir acá”. Miguel Ángel Borja lo tiene claro: hoy su cabeza no piensa más allá del 2025. En su último año de contrato, y en medio de diferent...
“Me gusta la exigencia de River. La idea es seguir acá”. Miguel Ángel Borja lo tiene claro: hoy su cabeza no piensa más allá del 2025. En su último año de contrato, y en medio de diferentes rumores sobre su salida desde finales del 2024, el delantero colombiano comenzó con el pie derecho la pelea por la titularidad: gol y asistencia contra la Universidad de Chile para ser la figura en el primer amistoso de la pretemporada, el sábado. Ahora, su objetivo será volver a consolidarse como titular en un caso más que particular: los números son intachables, pero su figura genera controversia pese a su deseo de continuar.
Borja tomó una decisión clave en el comienzo del año: desestimar la propuesta de CSKA de Moscú para jugar en el fútbol ruso, descansar con su familia en Colombia durante las vacaciones, no esperar una oferta para cambiar de aire y apostar a tener una pretemporada superadora en San Martín de los Andes. Y lo consiguió. El atacante colombiano que cumplirá 32 años el domingo completó todos los entrenamientos de la exigente preparación, jugó los 90 minutos en Concepción y se perfila para comenzar como titular en la formación que piensa el técnico Marcelo Gallardo para el debut con Platense del sábado en Vicente López, por la primera fecha del Torneo Apertura.
Con contrato hasta diciembre, su cláusula de salida bajó de 8 a 4 millones de dólares, pero la decisión del Colibrí expuso su voluntad: quedarse en River pese a los diferentes ofrecimientos y sondeos que tuvo -y tendrá- del extranjero. Está cómodo y se siente bien, seguro, convencido. Esa postura fue un guiño para el Muñeco, que tiene a Borja en alta consideración, más allá de que el año pasado su último partido como titular fue el 29/10 ante Atlético Mineiro (0-0) y luego fue suplente en sus siguientes siete partidos. El DT optó por la dupla de Facundo Colidio y Pablo Solari para los últimos dos meses y ahora el colombiano parece volver a tomar impulso, más allá de que Solari recién se recuperó de una molestia muscular de la pretemporada.
Desde que regresó el Muñeco, Borja suma seis goles en 19 encuentros (11 como titular), números que distan mucho de los 25 tantos en 29 partidos (27 de titular) que había logrado en el primer tramo del año pasado con la conducción de Martín Demichelis. En total, tiene 54 festejos en 110 participaciones con la camiseta millonaria, pero sus números no permiten cortar aún con el escepticismo que rodea a muchos hinchas de River.
Es que el centrodelantero que llegó a mediados de 2022 todavía no logró conquistar al público y su figura genera controversia: más allá de que su actuación en la semifinal de la Copa Libertadores generó cierta distancia con el público, su estilo futbolístico no termina de satisfacer el gusto del exigente paladar millonario.
El gol de Borja frente a la U de Chile“La decisión que tomé a la hora de venir a River fue clara: fue competir. Me gusta la exigencia de River, lo que exige el club, para eso estamos diseñados y mi idea es continuar acá. Estoy contento y agradecido con Dios porque me da la bendición otra vez de jugar y me regala una nueva victoria que suma en la confianza de cara a lo que se viene”, dijo Borja tras el 2-1 a Universidad de Chile en el primer duelo del año en Chile. “Fue una pretemporada brava, con mucho doble turno, muchos kilómetros recorridos. Creo que eso es comida para las piernas, es lo que necesitábamos y se vio reflejado dentro del campo”.
En Concepción se vio un Borja más que completo, ya que no solo aportó su cuota goleadora (asistió en el 1-0 y estampó el 2-1), sino que además formó parte constantemente de las asociaciones del equipo, presionó, pivoteó y fue de lo más claro del ataque millonario. Características que se asemejan mucho más a lo que pretende el DT para su juego. Además, junto con Jeremías Ledesma, Fabricio Bustos y Lucas Martínez Quarta fueron los cuatro que completaron los 90 minutos. Una actuación más que interesante en un momento clave, con la incorporación de Sebastián Driussi a los entrenamientos y tras los primeros minutos de Gonzalo Tapia con la camiseta de la banda roja.
Ya sin Adam Bareiro en el plantel, hoy Borja es el único centrodelantero natural que tiene Gallardo en su equipo. Más allá de que Colidio o Driussi puedan hacerlo, ningún otro futbolista tiene el ADN goleador que posee el colombiano. Y aunque el mercado es largo y todavía resta un camino por recorrer, su decisión está tomada. El Colibrí quiere seguir potenciando sus estadísticas para torcer su historia con el club.