Lo último

Milei, otro Francisco de Narváez

Javier Milei es percibido por el peronismo bonaerense como la reencarnación de Francisco de Narváez. El empresario que contribuyó decisivamente a que puedan capitalizar en su favor el descontent...

Javier Milei es percibido por el peronismo bonaerense como la reencarnación de Francisco de Narváez. El empresario que contribuyó decisivamente a que puedan capitalizar en su favor el descontento generalizado por la crisis económica y la inseguridad. Un fenómeno que amenazó con arrasarlo en los comicios del 2009. Pero al que logró sobrevivir gracias a los candidatos que los intendentes del conurbano pudieron incluir, con generosidad, en las listas del supuesto outsider antisistema.

Ese instinto de preservación los dejó a salvo de la derrota que sufrió Néstor Kirchner en la provincia de Buenos Aires y dañó para siempre la relación de Cristina con los intendentes. La desconfianza hacia ellos aún perdura. Impuestas por ley, las PASO reflejan aquella experiencia traumática para la corriente que lidera. Los caudillos están optando por repetir una salida pragmática a otra situación compleja, similar a la de casi 15 años atrás.

Fernando Rozas contribuye a recrear semejanzas. Entre apoderados de otras fuerzas se lo define como el dueño de Unión Celeste y Blanco. El partido que creó para De Narváez con Gustavo Ferrari, el inquieto abogado que fue jefe de campaña del empresario, asesor general de gobierno de Daniel Scioli y ministro de Justicia de María Eugenia Vidal. Rozas tuvo un breve paso por su gestión como adjunto del fiscal de Estado.

Unión Celeste y Blanco es uno de los partidos que formalizó alianza en la Justicia Electoral para que la Libertad Avanza compita en estas elecciones. La potestad de Rozas sobre esa fuerza ya le habría garantizado un lugar en la lista de diputados nacionales de Milei y otro para Fabián Luayza a diputado provincial en la Primera Sección. Luayza es apoderado de Unión Celeste y Blanco en la provincia de Buenos Aires. Y también director de equipamiento escolar de Axel Kicillof desde que Martin Insaurralde es su jefe de Gabinete.

Rozas tendría papel mucho más estelar para anudar alianzas con caciques territoriales como Guillermo Brito, intendente de Chivilcoy. Rozas compartió con Britos la representación de De Narváez en la Legislatura bonaerense. En 2011, Brito pidió licencia al cargo de comisario para su primera experiencia electoral. La policía bonaerense lo había designado al frente de la Departamental Lanús, cuya atención era absorbida por Lomas de Zamora. Uno de los partidos incluidos en su jurisdicción.

Brito está enfrentado al peronismo y Juntos por Florencio Randazzo y Sebastián García de Luca, que le disputan sin éxito el liderazgo local. De Luca es colaborador de Patricia Bullrich. Chivilcoy es parte de la Cuarta Sección. Allí se eligen 14 de los 92 diputados de la Legislatura y siete senadores. Los diputados se renuevan con cada elección presidencial. Según el censo del Indec, la concentración de electores en el Interior bonaerense pasó del 30 a casi el 40 por ciento del total.

Milei empata con el oficialismo y Juntos la intención de voto a presidente en la provincia. Brito irá por su reelección con la boleta de Milei y analiza si su apellido ocupará el cargo de gobernador. Su hermano Fabio es diputado provincial y finaliza su mandato en diciembre. Movimientos preventivos similares a éste se ejecutan mientras siguen sin definirse en el oficialismo las candidaturas a presidente y gobernador. Algo que podría ocurrir recién el 11 de junio. El kirchnerismo negocia con el gobierno nacional una PASO restringida a candidatos a presidente con una intención de voto de 20 puntos. Esa cláusula eliminaría a Juan Grabois, Wado De Pedro y Sergio Massa. Los que compitan lo harán con su candidato a gobernador. Victoria Tolosa Paz será el de Daniel Scioli. Aportará espíritu de combate, pero también los avales para presentar listas en las ocho secciones bonaerenses. Lo que no libra de incertidumbres al espacio de Alberto Fernández.

Emilio Pérsico visitó a Axel Kicillof. Al Movimiento Evita le preocupa no desentonar si el gobernador es elegido para la misión que resistió hasta el lunes: ser precandidato a presidente. “Cosas de Emilio” se justificó ante los intendentes Fernando “El Chino” Navarro, su socio en esa organización social, ante la consulta de los intendentes que trabajan para que Kicillof desista de su reelección.

Patricia Cubría, esposa de Pérsico, aspira a competir en las PASO por la intendencia de La Matanza. Igual que Verónica Magario, inusualmente feliz el lunes pasado. Un marcado contraste con Teresa García, la obligada confidente que le impuso Kicillof. La senadora quedó postrada este fin de semana. En apariencias, tras hablar con Cristina de Kicillof. A García le afligiría quedar otra vez a merced de La Cámpora. O, mejor dicho. De Wado De Pedro. La llegada de su primo, Jorge “Lalo” Rébora a la subsecretaría de Asuntos Municipales, eyectó a García del Ministerio de Gobierno.

Si Kicillof es precandidato a presidente, probablemente pida licencia y sea sustituido por su vice. Magario podría pasearse por la vidriera de la que careció para discutirle el cargo de intendente a su socio, Fernando Espinoza. En ese cálculo, De Pedro sería candidato a gobernador. El ministro del Interior tiene una intensa agenda con el conurbano. A pedido de Cristina, los intendentes desplegaron pintadas con una leyenda enigmática: “Wado-Cristina.”

A los intendentes no los seduce la llegada de De Pedro. Pero saben que es difícil que Insaurralde sea candidato. El jefe del Gabinete no fue a la reunión de intendentes en Quilmes con De Pedro, precedida por un debate virtual en el chat que los agrupa. Juan José Mussi (Berazategui) planteó la necesidad de tener boletas de todos los candidatos a presidente. Javier Osuna (Las Heras) advirtió que el congreso del Frente Renovador rechazará esa posibilidad.

Sergio Massa insiste en ser el único que represente el oficialismo. Empresarios le hicieron saber a los intendentes que pediría licencia al ministerio de Economía, donde lo suplantaría el jefe de la Aduana, Guillermo Mitchell. Sugestivamente, Grabois lo acusó de extorsionar al país mientras esa versión circula. Máximo visitó a Cecilia Moreau en el Congreso después del acto en Quilmes, probablemente para atemperar ánimos. Algo que debería ocurrir en Juntos si, como está previsto, este martes Jorge Macri es confirmado como el único candidato del Pro en la ciudad. El aparente éxito de esa coronación alentaría a Mauricio Macri para imponer el mismo criterio en la provincia de Buenos Aires. El activismo del expresidente complica por igual los planes de Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. Precisan competir en las PASO para legitimarse como dirigentes de peso propio.

Macri eligió a Néstor Grindetti como candidato a gobernador de Bullrich por una aparente virtud escasa: la disposición a renunciar si él se lo pide. Lo haría si prosperan las negociaciones para que Diego Santilli sea el único postulante. Esa posibilidad es resistida por el jefe del gobierno porteño, enfrentado a una curiosa paradoja. Su intención de voto es muy inferior a la de su candidato a gobernador según los sondeos en poder de Santilli. Sería difícil que se imponga en la PASO a Bullrich.

El radicalismo bonaerense insistirá en que Rodríguez Larreta deponga su actitud. Aliados a otras tribus de la UCR, Maxi Abad lidera el movimiento para evitar que Martín Lousteau sea quien suceda a Rodríguez Larreta, a quien acusan de intervenir en la vida interna de la UCR a través del senador porteño. El jefe de gobierno se convirtió en alguien de temer para sus adversarios luego de desdoblar las elecciones en la ciudad. Una rebelión mansa que nadie esperaba. El espejo donde se mira para no compartir a Santilli con Bullrich. Tal vez por temor a prohijar otro De Narváez.

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/opinion/milei-otro-francisco-de-narvaez-nid26052023/

Comentarios
Volver arriba