La reforma de este PH en Balvanera lo hizo mirar al patio y crecer hacia adentro
“El PH no podía crecer de forma vertical, ya que arriba hay otra vivienda. Para ganar metros y luminosidad, solo había dos recursos posibles: aprovechar el patio y la altura”, nos dijeron las...
“El PH no podía crecer de forma vertical, ya que arriba hay otra vivienda. Para ganar metros y luminosidad, solo había dos recursos posibles: aprovechar el patio y la altura”, nos dijeron las arquitectas Juliana de Lojo y Ainoha Mugetti, socias de Estudio Yama.
La familia de tres que compró esta casita en formato PH esperaba que les permitiera ampliarse y tener un espacio al aire libre en la ciudad. Como conocían a Juliana y Ainoha, no dudaron en llamarlas para que los acompañaran, incluso desde la búsqueda de la propiedad. Ya con el proyecto definitivo, empezó la reforma, que contón con la arquitecta Luján Kanneman, también de estudio Yama, como jefa de obra.
La jugada más importante fue eliminar el muro que separaba el living del patio: movimos ese límite y generamos uno transparente, de hierro y vidrio, que se puede abrir por completo.
Arqs. Juliana de Lojo y Ainoha Mugetti, socias de Estudio Yama
El cuarto infantil es el que está más próximo a la puerta de entrada. Allí se dispusieron dos sectores: abajo, la cama y un cómodo espacio de guardado que aprovecha también la escalera; en el nuevo entrepiso de madera (reforzado con tirantes de hierro) está el sector de juego.
Del cielo raso cuelga una hamaca de tela: soldaron ganchos a la estructura del techo para sujetarla.
Camino al espacio social integradoSegún el sector, el cerramiento de hierro y vidrio tiene puertas plegables o ventanas.
Power“La pared es tan alta que necesitaba un elemento potente, o se iba a perder. Por eso pensamos la biblioteca desde el inicio del proyecto”.
La casa original tenía serios problemas: instalaciones antiguas, una disposición que desaprovechaba los contados metros y el peor diagnóstico, problemas de humedad. Allí se lanzaron a cambiar las conexiones de plomería y electricidad, hacer los revoques a nuevo, levantar pisos (recuperando lo posible) y crear el cerramiento vidriado que trae tanto aire y luz. Evaluando el trabajo hecho, Lojo y Mugetti concuerdan: “Rescatamos la cáscara”. Que no es poco.
Solución ingeniosa para la cocinaEl PH no tenía calefacción: hicieron las instalaciones desde cero para poner radiadores en todos los ambientes.
Ampliar la cocina era prioritario para los clientes: mantuvieron su ubicación, pero cambiaron el ingreso para agrandarla hacia un patio de 2x3m que techaron con un cerramiento de vidrio con ventiluz.
Una bocanada de aire y luz llega a través de la lucarna.
Cuarto principalGracias al nuevo cerramiento –que corrió los límites– pudieron ampliar el dormitorio, además de ventilarlo e iluminarlo de manera directa, algo que antes no pasaba. En contraste con el ladrillo a la vista, las conexiones exteriores de las luminarias, sujetadas en bandejas o con varillas metálicas y pintadas de negro refuerzan el estilo industrial.
En el baño en suite, la iluminación trasera del espejo lo despega de la pared; en el cielo raso, un plafón para un uso más tradicional y general.
Espacio de trabajo“Abrimos al living el entrepiso, que estaba en muy mal estado y totalmente desaprovechado. Hoy es un fantástico escritorio para los dueños de casa”.